El intendente Sansho (1954)

Un señor feudal (o gobernador o alcalde, depende de la versión) cae en desgracia al mostrar compasión por los campesinos. Le obligan a exiliarse. 

La esposa y sus hijos vagan miserablemente por el país. Son engañados por una sacerdotisa que rapta a los niños y los vende.

Acaban en las tierras controladas por el intendente Sansho. Un déspota malvado.

De mientras, la madre es mutilada al intentar escapar y acaba en un burdel.

Pasan diez años, pero la crueldad de Sansho sigue. La chica aún recuerda las enseñanzas del padre. El chico, por contra, acata sin cuestionar las ordenes de Sansho. Un día, pero, una reminiscencia de un recuerdo hace despertar de su letargo al hermano, que espoleado por su hermana, decide huir.

La hermana se queda con la disposición de soportar la tortura.

Pero al final decide "irse" en uno de los suicidios más emblemáticos de la historia del cine.

Un monje ayuda al fugado. Por si alguien se ha perdido, el monje es Taro, el hijo de Sansho que huyó de la tiranía del padre para reflexionar sobre la maldad en el mundo.

Con una carta de recomendación del monje Taro, el prota se presenta ante un importante gobernador de la región

Le nombra alcalde (de la nada), y el tipo vuelve para liberar a los esclavos. En especial a los de Sansho.

En una de esas habituales trifulcas administrativas el alcalde no tiene jurisdicción sobre las tierras (y los esclavos) de Sansho, ya que dependen del Emperador.

Pero como los hombres de Sansho se han dedicado a romper los carteles con las leyes del alcalde, el alcalde en persona prende a Sansho. Ahora solo le queda liberar a su hermana.

Pero ya es tarde para algunas cosas.

El alcalde renuncia al cargo y marcha en búsqueda de la única familia que le queda: su madre.

En la biografía del director hay algunos detalles de la infancia que de conocerlos nos es imposible no verlos reflejados aquí. La familia de Mizoguchi fue muy pobre. El padre era un déspota violento que acabó vendiendo a su hija, la hermana del futuro cineasta Kenji Mizoguchi. 

La historia del film, pero, no es autobiográfica. Se basa en un relato del escritor Mori Ogai (1862-1922) médico militar, escritor y notable traductor. Gracias a él se pudo leer en japonés a Shakespeare, Tolstoi, o a Goethe. También fundó y dirigió revistas literarias.

El intendente Sansho (Sansho Dayu; 1954) dirigida por Kenji Mizoguchi.

Guion:Yoshikata Yoda, Yahiro Fuji. Basado en un cuento: Mori Ōgai.

Reparto: Kinuyo Tanaka, Yoshiaki Hanayaki, Kyôko Kagawa, Eitarô Shindô, Akitake Kôno, Masao Shimizu, Ken Mitsuda, Kazukimi Okuni.