El cine y las vidas de repuesto
En este humilde ciclo dedicado a la historia de Japón a través de películas, Millennum Actress es la obra que compendia exactamente esto. Un homenaje al cine. Y al cine japonés del siglo XX con, de fondo, los avatares sociales y bélicos de la historia de ese país.
La sinopsis del film nos dice que un documentalista y su operador de cámara van a entrevistar a una anciana que, de joven, fue una gran estrella del cine: Chiyoko Fujiwara.
La mujer irá desplegando sus recuerdos, reales o cinematográficos. O, lo que es habitual en el cine de Satoshi Kon, una mezcla de realidad, ficción y metaficción.
El documentalista Tachibana y su operador de cámara irán gravando "dentro de los recuerdos" de la actriz Chiyoko para descubrir, de repente, que en verdad estamos dentro de un set de rodaje. El recuerdo, el fragmento de vida que hemos visto, es la escena de una de sus películas. O, quizás, son sus películas las que reflejan su vida.
Puede parecer complicado si uno intenta analizarlo. Pero solo hay que dejarse llevar. Los pensamientos, los recuerdos o los sueños no tienen guion. Como tampoco lo tiene la vida, la nuestra, aunque creamos controlarla o seguir las pautas marcadas de un proyecto de vida.
En esta película Satoshi Kon sigue explorando la relación entre la estrella y su fan, como ya hizo en Perfect Blue. Aquí el fan que observa desde lejos, descubrimos que es un joven Tachibana. Y su evolución no es turbia como el obseso de Perfect Blue, sino empático. Metidos en sus recuerdos, Tachibana y el operador de cámara, pasan de ser observadores de la vida de la actriz Chiyoko, a implicarse en ella.
Este juego imposible solo es creíble dentro de la película. Vivir tan intensamente el relato de la historia personal que el oyente se implica hasta meterse en la vida recordada.
La película está plagada de escenas que saltan en el espacio-tiempo con naturalidad y elegancia. Una Chiyoko mayor voltea su rostro y al detenerse, vemos que ahora es una Chiyoko joven. O una Chiyoko "viva" va a colocarse dentro de una fotografía suya para "crear" ese momento que la fotografía preservará para siempre.
Millennium Actress está plagada de referencias meta cinematográficas. No pretendo listarlas con precisión forense, esto nos arruinaría la película. Para citar solo tres: Ciudadano Kane (1940), Fedora (1978) o La rosa púrpura del Cairo (1985).
Y en cuánto a cine japonés, incluso un ignorante como yo, que solo conoce la superficie, es capaz de encontrar escenas y momentos que remiten a películas del cine clásico nipón. Tampoco les voy a saturar con esas referencias.
Millennium Actress (Sennen Joyû; 2001) dirigida por Satoshi Kon.
El cine, la vida, la memoria, el amor, el recuerdo, la realidad y la ficción. En dos palabras: Satoshi Kon.