domingo, 9 de noviembre de 2025

Tokyo drifter (1966)

La yakuza pop o el segundo Lupin

Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki

El jefe de un clan mafioso ha decidido jubilarse de sus negocios. Y Testuya, el mejor asesino del clan, decide también abandonar el crimen. Pero por fidelidad al jefe, sigue recibiendo algunos golpes. El pasado le persigue y los antiguos rivales y las nuevas traiciones de falsos aliados, no le permiten a Tetsuya asentarse en ningún lugar. Y está condenado a vagabundear solo por Tokio. 

En Tokyo drifter (o el vagabundo de Tokio) hay tiroteos, persecuciones en coche, malvados de pandereta, puertas secretas y trampas ocultas. Y un anti-héroe que sigue su propio camino mientras el mundo, violento y cínico, en el que ha estado envuelto se niega a soltarlo. 
Los mafiosos hablan a puñetazos y con disparos. Y las muchachas cantan en clubs o reciben sonoros bofetones. Y una de ellas se pasa la película leyendo un manga.
Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki - manga
La muchacha leyendo ¿la Shonen Jump?

La estética y el desenfado de Tokyo drifter del cineasta Seijun Suzuki tuvo una influencia tremenda en una franquicia manganime que ha hecho furor en el mundo entero: Lupin III. Aunque el origen biográfico del personaje de Lupin The Third, sea el Arsene Lupin de las novelas de Maurice LeBlanc, el manga de Monkey Punch, bebe claramente de James Bond y de este yakuza pop.
Lupin the Third - Seijun Suzuki
Suzuki co-dirigió un film de Lupin: "El Oro de Babilonia"

La yakuza, la mafia japonesa que siempre se ha regido por códigos de honor y lealtades (aunque nunca faltan en ella las traiciones) se apoderó, en la cultura popular, de ese aura de pureza tradicional que antaño tuvieron los samuráis. 
Y así, los ronin, o samuráis sin clan, mutaron en los taciturnos asesinos a sueldo con traje. La katana dejó paso al revólver. Y las hazañas de esos personajes se transmitían, ya no oralmente como leyendas, sino en novelitas pulp y en el nuevo género artístico que dominó el siglo XX: el cine.
El cine de gánster, el noir y el Hollywood clásico, llegaron a Japón, y todo ello formó un cóctel (sino explosivo sí con muchos tiros) propio de Japón: el cine de yakuzas.
Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki

Entre la épica y la tragedia, que pretendía mostrar la crudeza de la realidad de la yakuza, el cineasta Seijun Suzuki, un artesano de este cine de yakuzas, le dio su toque de modernidad pop, propia de los años 60. 
Trajes en rojo, americanas verdes, minifaldas y gente joven bailando, música moderna y un gusto por el entretenimiento que dejaba, muy claramente, a un lado la verosimilitud.
Tiroteos imposibles donde los esbirros malos caen de un único y certero disparo. Donde las armas vuelan de aquí para allá. Donde el protagonista esquiva balas como si se apartase de autobuses y rueda por el suelo, o por el aire, recibiendo alguna vez un disparo pero que no llega a ser más grave que un leve rasguño. 
Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki

Todo ello poco verosímil en realidad. 
Y luego está el color. Las composiciones cromáticas también tienen poco de naturales aquí.
Tokyo drifter es una sobreexposición de colores. A veces el contraste es tan forzado, como en el arranque del film, que los yakuzas parecen actores negros en trajes blancos. Hay escenas en que todo lo que hay en la pantalla es monocolor:  El verde neón de las callejuelas. O un tipo en traje blanco cruzando un escenario nevado.
Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki
Más blanco que Kieslowski

Para poca realidad, esos escenarios teatrales de los locales nocturnos donde no existen paredes. O esa recreación de saloon del far west, un escenario creado solo para la típica pelea de western en que se rompen sillas y cristaleras. Todo ello busca el puro entretenimiento por más teatral que parezca... 
Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki

Seijun Suzuki fue un cineasta bajo contrato por la productora Nikkatsu. Realizó casi 40 películas en 12 años. Eran obras de bajo presupuesto y más bajo argumento. Películas de serie B sobre yakuzas. La creatividad de Suzuki, y los recortes de presupuesto, le empujaron a ir más allá. Siendo cada vez más imaginativo, elíptico, surrealista y críptico. En su obra van apareciendo cada vez más réplicas de humor absurdo en el guion, ángulos de cámara poco habituales y la ya mencionada explosión de colores pop. 
Tokyo drifter - 1966 - Seijun Suzuki
El peculiar encuadre de la reunión de los jefes de la yakuza

Tras la película Branded to kill, Suzuki fue despedido de Nikkatsu y aunque demandó al estudio por despido improcedente, su nombre pasó a engrosar una lista negra que lo mantuvo durante casi 10 años en el olvido (y sin dirigir). Hoy en día su figura se ha ido recuperando y su obra se considera de culto.

Seijun Suzuki, como el Tetsuya protagonista de Tokyo drifter, es un tipo que hace lo que puede con lo que le dan. Pero no se pliega a las normas, y va más allá. Hasta alcanzar un estilismo artístico considerable. 
Y es que la pobreza, amigos, agudiza el ingenio. 


Tokyo drifter (Tôkyô nagaremono, 1966) a.ka. El vagabundo de Tokio dirigida  por Seijun Suzuki. El Lupin pop de la yakuza.

viernes, 7 de noviembre de 2025

Muerte por un rayo

El Presidente y su asesino


Drama biográfico-político del presidente de los Estados Unidos, James Gardfield. Y del hombre que lo admiraba y que terminó asesinándolo.


Muerte por un rayo (Death by Lightning; 2025)
Miniserie. Netflix. Temporadas: 1 · Episodios: 4
Creador Mike Makowsky (Creador)
Basado en el libro de Candice Millard



James Gardfield fue el presidente nº 20 de los Estados Unidos. El segundo Presidente en ser asesinado (tras Lincoln) y el segundo con el mandato más breve. Gardfield fue presidente entre marzo y setiembre de 1881.

Muerte por un rayo - Death by Lightning - Michael Shannon - James Gardfield
Michael Shannon interpreta a James Gardfield

La serie abarca desde su elección como candidato del partido republicando en la convención de 1880, en la que Gardfield ni siquiera se había postulado, hasta su fallecimiento, el setiembre de 1881, dos meses después de ser disparado.

Y en paralelo, las vicisitudes y desventuras de un tipo, ladrón, cantamañanas y aspirante a cargos políticos, que terminaría disparando contra el Presidente y siendo juzgado y ejecutado por ello.

Muerte por un rayo - Death by Lightning - Michael Shannon - James Gardfield
Cuando el título de la serie cobra sentido

Aunque Gardfield (Michael Shannon) sea el protagonista, es quizás de su asesino (interpretado por Matthew Macfadyen) de quién más llegamos a conocer. 
Hay pinceladas biográficas y destellos de su pasado. Pero los reveses que va padeciendo y la megalomanía que va adquiriendo son mostrados de forma concisa y brillante. La actuación también es meritoria. Hacer de bueno (de Gardfield) es fácil, pero hacer de malo (su asesino) es mucho más complejo y rico en matices.

La serie recrea la época con detalles: hay boñigas de caballo -el transporte de la época- en las calles. Y se aprecia la diferencia de calidad en los trajes de los políticos y el resto de ciudadanos (o del futuro asesino).

Como buena serie política también muestra lo peor de esta "vocación": Las zancadillas entre integrantes del mismo partido o el interés egoísta de todo aquel que aspira a un cargo y a las prebendas que conlleva. En esto, da igual la época, la política siempre es la misma.
En ese barro que embrutece incluso al alma más idealista, destaca la actuación del bigotudo Nick Offermann que eleva su clásico rol de Ron Swanson (Parks & Recreation) hasta la Casa Blanca.

Muerte por un rayo - Death by Lightning - Nick Offerman - Chester Arthur
Nick Offermann interpreta a Chester Arthur


En definitiva Muerte por un rayo es una mini serie que alumbra a un personaje cuyo paso por la historia fue breve, pero cuyo impacto en las personas de su entorno fue grande. Y la serie me resulto más afable y mucho más entretenida que el Lincoln de Spielberg.

domingo, 2 de noviembre de 2025

El cartero de Alpartir (1963-1968)

La japonesa que se volvió monja de clausura en España y el cartero aragonés que se fue a Japón

Libro Kimura y el cartero de Alpartir

Había una vez una chica llamada Masako Kimura, nacida en Japón, cuyo padre era un sacerdote budista. Masako se convirtió al catolicismo y su fe verdadera alcanzó cuotas celestiales cuando decidió irse a vivir al convento de clausura de las Hermanas Clarisas de Arnedo (en La Rioja - España).

Puede que la influencia del misionero vasco Francisco Zendóquiz afincado en Japón, tuviera bastante que ver. Y también que la hermana del misionero fuera abadesa en el convento de las Clarisas de Arnedo.

En todo caso, Masako Kimura logró su sueño. Aunque no fue fácil.
Placa de recuerdo del paso de Masako Kimura por Alpartir


El misionero Francisco Zendóquiz mandó una misiva a doña Mari, la maestro del pueblo de Alpartir, en Zaragoza. Se precisaban 40.000 pesetas de la época para el viaje (Según la calculadora del IPC del INE esto serían unos 9.700€ en otoño de 2025). Así que todo el pueblo de Alpartir se volcó para recaudar fondos para que esta japonesa pudiera venir a España. La noticia se volvió viral gracias a los medios de comunicación hasta alcanzar el nivel nacional. El programa de radio Madrid de la cadena SER, "Ustedes son formidables", cuyo objetivo era, precisamente, recaudar fondos entre los oyentes, llegó a sortear el vehículo del párroco del pueblo de Alpartir en una rifa. Lograron reunir el dinero para costear el viaje y Masako Kimura llegó a Alpartir donde fue recibida como si fuera Míster Marshall.
Masako Kimura en Alpartir (Zaragoza) en 1963
Y como el Míster Marshall de Berlanga pasó por allí y se fue a Arnedo a vivir en un convento de clausura para el resto de sus días.
Masako Kimura, la monja japonesa del convento de las Hermanas Clarisas de Arnedo

Como la historia daba para el drama, tuvo una continuación. En el mismo programa de radio, "Ustedes son formidables", su presentador Alberto Oliveras, animó a los oyentes a escribir cartas y postales a los padres de Masako Kimura que debían estar preocupados por su hija. 
¿Y dónde había que mandar esos tiernos mensajes de acogida? 
Pues al municipio de Alpartir.
Y así la minúscula oficina de correos de Alpartir, que era la casa del cartero Rafael Barranco, se vio inundada de mensajes de cariño llegados de todos los puntos de España. 
¿Y qué había que hacer con todas esas cartas? 
Pues hacérselas llegar a los padres de Masako Kimura, en Japón. 
¿Y cómo hacer eso? 
Pues mandando allí, al cartero.
😂😂😂

Y así es como esta sorprendente historia se vuelve aún más sorprendente. 

Rafael Barranco, funcionario de Correos del pueblo de Alpartir (Zaragoza) se fue a un pueblo en Saitama (Japón) en 1963 para entregar una saca de correo (una saca simbólica) a los padres de Masako Kimura.

Libro Kimura y el cartero de Alpartir


Esta historia está recogida en el libro "Kimura y el cartero de Alpartir" coordinado por Félix Arenales y editado en 2005 por la Diputación de Zaragoza.

Y de esta historia se hizo una coproducción entre la RTVE y la TBS japonesa. Se trata de un mediometraje de 40 minutos que se tituló "El cartero de Alpartir" y que se emitió el 4/1/1968 por TVE. En Japón el programa se tituló "El Santo llega a Japón".  
Noticia del rodaje de la película El cartero de Alpartir (LaVanguardia-Hemeroteca_08-09-1963
LaVanguardia Hemeroteca 08-09-1963

La película inicia con la algarabía de los niños de Alpartir con la llegada de la muchacha (que aquí se llama Miko Sakai). La japonesa que ha decidido profesar la fe católica e irse a vivir a un monasterio de clausura. La película se centra en el cartero y del personaje de Miko no oímos ni su voz.
El cartero aquí se llama Carlos (y lo interpreta el actor Joaquín Pamplona) y guarda un parecido, para mí bastante inquietante, con Francisco Franco.
Joaquín Pamplona El cartero de Alpartir
No me negarán que ese bigotillo y ese frente despejada no les recuerdan a alguien

Carlos, el cartero de Alpartir, se va a Japón, llega al pueblecito y junto al cartero de allí, se acerca a la casa de los padre seguidos por la comitiva de autoridades y curiosos. El padre que no quiere saber nada de la hija (porque se ha ido a España, y encima ha abrazado otra fe religiosa) se emocionará con las cartas de España, y terminará haciendo sonar la campana del templo para despedirse de Carlos.
Antes de volver a Espña, Carlos el cartero de Alpartir, tiene tiempo de cantar una jota a los niños japoneses que le siguen a todos lados y lo observan con curiosidad.

La película busca un paralelismo con la llegada de Miko a Alpartir (campanas, niños y jolgorio) y, más tarde, la salida de Carlos de Japón (con niños, algarabía y campanas).
Un detalle simpático: En Japón las autoridades discuten entre sí para apropiarse de Carlos. Y sacarle, a la historia del cartero español que ha viajado a Japón, un rédito político en las elecciones. 
Elecciones, algo que la España de 1963 no hacía falta hacer.



El cartero de Alpartir (1963) dirigida por Harunosuke Nakagawa y Carlos Estelar.
La película, en verdad, no es gran cosa, pero la historia es de traca, ¿no?

miércoles, 29 de octubre de 2025

Verdad o reto (2018)

Unos jóvenes juegan a un ¿Verdad o reto? maldecido.
Y van muriendo.


Lucy Hale acechada por el demonio del juego

La actriz Lucy Hale, que fue durante 7 temporadas Aria Montgomery en Pretty Little Liars es la protagonista aquí.


Un grupo de amigos se van de Spring Break al otro lado de la frontera, a México. Un joven (estadounidense) les invita a ir a beber a un apartada iglesia derruida. Y todos van. 
El tipo les propone entonces jugar a ¿Verdad o reto? Y todos juegan. 
Y luego el tipo se larga diciendo que si no juegan en serio (diciendo la verdad o aceptando el reto) morirán.
Y todos van muriendo.

Tienes que hacerlo: tienes que romperme la mano con el martillo


La premisa argumental es una solemne tontería. Así que la solución a la "maldición mexicana" aún lo es más.
Visitan a una monja mexicana que ha estado 50 años en silencio. Pero que  escribe notas en inglés. 
La anciana deslenguada les dice cómo detener la maldición.

Así que secuestran al tipo que les llevó a la iglesia. Le obligan a ejecutar el conjuro y, SPOILER, no funciona del todo bien. Así que la prota que es una influencer lanza un reto en un vídeo de su canal. Y todos los que lo ven están ahora "in the game".
Final abierto por si hay que hacer una secuela.



Aunque es un "juego maldito" el demonio posee a la gente al azar. Pero solo lo pueden ver, los que están en el juego. 
Los efectos especiales de las posesiones son bastante cutres. Y es un recurso del que se abusa demasiado porque no hay nada más.


En realidad, no hay nada más en toda la película.
Bueno, hay una biblioteca:



Los estante están colocados tapando la luz natural de las ventanas del edificio. ¡Alguien debería se asesinado por esto!



Verdad o reto (Truth or dare; 2018) dirigida por Jeff Wadlow.
La única razón es ver a Aria Montgomery en una fiesta loca por México.

domingo, 26 de octubre de 2025

Tora-san (1969)

Solo en vendedor ambulante muy campechano



En 48 películas, rodadas durante casi 30 años, el actor Kiyoshi Atsumi interpretó el personaje de Torajima Kuruma, Tora-San. 
En 1996, al fallecer el actor, Yoji Yamada, el creador del personaje, guionista y director de la mayoría de las películas se negó a seguir.  

Pero Tora-San es una de las franquicias más longevas y populares del cine y la cultura japonesa. Y a modo de homenaje, recuperando escenas de las películas anteriores y material desechado, se rodó la película número 49. 
Y en 2019, para conmemorar el 50 aniversario, se rodó Tora-san, Welcome Back! la película número 50 de la franquicia. Ahí, es nada.


Pero, ¿Quién es Tora-San?
En esta primera aparición en la pantalla, conoceremos a Torajima Kuruma. Tora-san es un vendedor ambulante, campechano y pintoresco. Quizá algo rustico y tradicional, que provoca malentendidos sin querer y pequeños desastres allá donde va.
En esta película se nos presenta a Tora-San volviendo al que fue su barrio tras 20 años de ausencia. Sus padres ya fallecieron, pero tiene una hermana pequeña, Sakura, y unos tíos que lo acogen. Así que parientes y vecinos celebran con una fiesta el regreso del tipo que parece muy elegante y formal.

A la mañana siguiente Tora-San acompaña a su hermana a una entrevista para una matrimonio concertado (un miai). Allí, a medida que va bebiendo y se va animando, Tora-San arruina la propuesta con sus chistes, su vulgaridad y su borrachera.
En su afán de proteger a su hermana, Tora-san espantará a otro posible ligue, hasta ser rechazado y expulsado de la casa. Sin ningún rencor en el corazón se irá para volver pronto, como si nada hubiera pasado. Dispuesto siempre a ayudar pero provocando más enredos que soluciones. Luego conocerá a una chica pero su intento de boda acabará por romperle el corazón, ya que ella elegirá a otro.

Y este esquema: viajar por Japón, conocer a mujeres, sufrir un desengaño y regresar a su barrio será el mismo patrón de todas las películas de Tora-San. Un planteamiento arquetípico, unos escenarios locales conocidos y la personalidad de un tipo de buen corazón pero bastante desastroso, harán el resto para convertir a Tora-san en todo un fenómeno. O al menos, en su patria.


Charlot, Cantinflas y Paco Martínez Soria no tienen nada que ver entre sí. Pero hay cosas en común en sus personajes típicos. En todos ellos y también en Tora-San. Sus personajes son tipos humildes, espabilados, que aspiran a cosas que por lo general no consiguen. A veces son objeto de burla de los modernos metropolitanos, que les toman por rústicos y pobres. Tienen buen corazón pero a su alrededor hay enredos, malentendidos y a veces, desastres. Se les quiere, pero es mejor no tenerlos muy cerca.

Y sus películas reflejan la realidad de su tiempo. 
En el caso de Tora-San y sus casi treinta años de aventuras, vemos como se moderniza Japón: las casas, los barrios, las calles, las ciudades. Y también como las modas de vestuario o cortes de cabello van evolucionando.
Y cómo se modifican también los aspectos sociales: aquí Tora-san le pega un sonoro bofetón a su hermana. Y no pasa nada.
Ese es el verdadero valor de estas películas. Amén de algún chiste descatalogado o algún cameo. Aquí, en la primera película de Tora-San, por ejemplo, aparece la leyenda Takashi Shimura en el rol de suegro de la hermana de Tora-San. 


Tora-san 1: It's Tough Being a Man (Otoko wa tsurai yo; 1969) dirigida Yôji Yamada. Si completan las 50 películas de la franquicia casi les darán un carné de japonés honorífico. 

miércoles, 22 de octubre de 2025

Ratter (2015)

El psycho enamorado de Ashley Benson




La actriz Ashley Benson fue, durante 7 temporadas, la Hannah Marin de Pretty Little Liars.


Alguien ha hackeado los dispositivos con conexión a Internet de una universitaria y se dedica a espiarla...


Vamos a estudiar a la biblioteca

Toda la película se ve desde los puntos de vista de las cámaras del móvil, el portátil o la TV. Como pirueta técnica, es arriesgada.
Gracias a que el portátil y el móvil cambian de ubicación, está película es algo más dinámica que, por ejemplo, Paranormal Activity (esa película de terror filmada desde las cámaras de seguridad de la casa donde ocurren cosas raras). 

Ratter pero sufre también de la pesadez y de la falta de información. Ocurren cosas fuera de plano (pero delante de la protagonista) que no podemos ver. Por ejemplo: Nunca veremos qué le escriben en un chat, solo vemos su cara reaccionando. Eso obliga a escenas en que ella llama a la amiga y debe leerle lo que le han escrito. 
Ser fiel al punto de vista está muy bien, pero el resultado para el que sufre la película es algo pesado.

Vamos a tener una cita

Durante más de 40 minutos Ashley Benson sostiene, sola, la "trama" de la película. Barre el piso, baila, juega a la Wii Sports, se depila las piernas,... 
Así que Ashley Benson es "la trama".
Si la aman, esta sobredosis de su cara les fascinará. Y si no la soportan, pues mejor no se acerquen porque ELLA es todo lo que hay que ver aquí.

 Vamos a llamar a mamá por skype

Otra lectura de la historia es que toda la película es la narración de un psycho observando a su enamorada. 
Pronto no le basta con mirarla o vigilarla. Debe acercarse. Pero como es ser disfuncional hace cosas "de enamorado" bastante raras, como aporrear la puerta de noche o asesinar un gato...

Y hablando del gato...
La primera noche que el gato está en el piso es la primera vez que vemos cómo el psycho se cuela en la casa (con la muchacha dentro). El gato no reacciona pero al día siguiente el pobre minino, aparece muerto.
Es decir, el psycho no mata al gato para que no le delate cuando entra. Lo mata por ¿maldad?¿por celos?

A la secuencia del asalto le sigue una simpática incoherencia:
El asalto nocturno nos muestra cómo abrir, desde fuera, una puerta que tiene un pestillo con cadena. (Vayan a ver eso que es bastante es útil). 
Pero nunca muestran cómo cerrar la puerta con pestillo con cadena DESDE FUERA.
Y es que a la mañana siguiente del asalto, la puerta sigue cerrada desde dentro con el pestillo con cadena. ¿Cómo puñetas cerró la puerta desde fuera?



Y ahora volvamos al tema del "psycho enamorado":

La escena del psycho echándose en la cama donde ella ha dormido, una escena superpuesta a una grabación de ella durmiendo, sola, en la cama, es un ejemplo claro que esto es una historia de "pyscho enamorado".


Y de "psychos enamorados" hay muchas ficciones, pero hoy quisiera reivindicar una en concreto. Se trata de la serie Profiler, protagonizada por Ally Walker, que tenía su propio y carismático "pyscho enamorado", Jack.

Pero volvamos a RatterTras un buen rato de película (que solo dura 80 minutos pero que se sienten como dos horas) uno se pregunta quién y por qué: 
¿Quién es el psycho? ¿Y por qué a ella?

El mensaje del director (lo vemos en los créditos finales con decenas de clips de gente random gravada por las espías cámaras de sus dispositivos) es que es ELLA como podría ser cualquiera de nosotros.
Lo cual nos lleva a que el psycho sea, al final, un tipo random.
(No es el ex. No es el compañero de clase. Y no es la amiga. Ojo, que ese último giro hubiese sido bueno).

En los angustiantes minutos finales vemos que el asaltante la ataca (no entra de golpe sino que ya está dentro de la casa) y el film acaba así. 
Acaba con los chillidos de la madre que ve el ataque por skype, mientras se oye el ras-ras de la cinta americana (o sea, cinta aislante para empaquetar).


Hay una escena post créditos con la policía llegando al piso. 
Pero no sabemos qué encuentra (o que no).
¿La atacó? 
¿La asesinó? 
¿La secuestró?
Pero por favor, no me digan que es un final abierto por si había la posibilidad de hacer una secuela. 
De verdad que no haría falta.


Ratter (2015) dirigida por Branden Kramer.
La única razón para ver esta sobredosis de Hannah Marin es por si la echan de menos.

domingo, 19 de octubre de 2025

El ahorcamiento (1968)

Afrontemos este tema: Japón y la pena de muerte



La película está dirigida por el siempre arriesgado Nagisa Oshima. Del que ya hemos comentado Feliz Navidad, Mr. Lawrence con David Bowie haciendo de preso y Ryūichi Sakamoto haciendo de un improvisado Mishima. Band of ninja, la adaptación literal de un manga a la gran pantalla. Y claro está, El imperio de los sentidos. La película más famosa de cochinadas japonesas.


Esta película tiene tres partes. O quizás habría que decir que hay tres películas vinculadas aquí. Y aunque tienen a los mismos protagonistas, en la misma situación, cada parte, o película, tiene un tono y casi diría que un género cinematográfico distinto.

Arranca con la parte documental. Inicia con una pregunta en pantalla para el espectador "¿Apoyas o te opones a la abolición de la pena de muerte?"
Luego nos da unos porcentajes estadísticos. Parece que el 71% se opone a su abolición. A ellos se dirige una explicación ilustrada y detallada de cómo es la cárcel y la sala, y de la rutina para llevar a cabo una ejecución. 


Aquí vemos a los personajes de la película: el fiscal, los funcionarios de la cárcel, el médico, el cura y, obvio, el preso. Al que llamarán R.

Cuando R. es ejecutado empieza la segunda parte, una comedia negra a lo Berlanga cuyo humor se va esfumando sin que uno se de cuenta. Resulta que, tras ser ahorcado, el corazón de R. sigue latiendo. Así que sigue vivo. Los funcionarios y las autoridades entran en una discusión sobre cuál debe ser el procedimiento a seguir. ¿Deben ejecutarlo otra vez? ¿Deben reanimarlo primero y luego ejecutarle? 
Nadie quiere tomar una decisión definitiva y todos intentan, de un modo u otro, hacer su trabajo pero cargarle "el muerto" a otro. De mientras, el preso se reanima. Pero no recuerda nada. Ni quién es, ni dónde está.
Y eso lleva a los burócratas funcionarios a otro grave dilema.
Si el preso no es consciente de quién es y de por qué se le ejecuta, eso ya no es una ejecución legal, sino un asesinato. Así que los funcionarios DEBEN hacer que el preso R. recobre la memoria.
Inician una serie de recreaciones acerca de los asesinatos que cometió R. Los funcionarios fingen estrangularse. Pero R no reacciona. Así que la recreación pasa a elaborados teatrillos, con vestuario y atrezzo in crescendo, que abarca no solo el crimen, sino también las circunstancias sociales y familiares de R. Todo este juego de representaciones se realiza con esa diligencia profesional tan japonesa. Y a la vez provocando un bochorno de vergüenza ajena, que roza el patetismo.

Se produce un momento "mágico" cuando la acción salta de la sala de ejecución a la casa de R. Le vemos en su barrio de chabolas. Y en la ribera del río por donde persiguió a una muchacha hasta atraparla, violarla y asesinarla. Luego seguimos viendo a R. vagando por las calles, siempre con todos los funcionarios detrás, como un coro, siguiéndole hasta el instituto donde cometió el segundo crimen.
Esta parte es maravillosa porque no sabemos si se trata de una recreación del crimen en los escenarios reales o si, en verdad, nunca llegan a salir de la cárcel.

Este realismo mágico adquiere tintes surrealistas cuando, en la tercera y última parte de la película, volvemos a estar en la sala de ejecuciones y una mujer está allí. Primero solo la ve R., y luego los funcionaros van advirtiendo su presencia. ¿Pero es real esa mujer ahí?
Ella dice ser la hermana de R. que viene a recordarle qué él es un coreano entre japoneses.
Este es otro punto fuerte de la película: Nos muestra el agrio racismo de esos personajes japoneses para con los coreanos. R. nació en Japón, según nos dicen, pero como sus padres eran coreanos, él no es japonés. 
Cuando recrean los ambientes familiares de R. un funcionario da indicaciones artísticas a los improvisados actores: "Eres coreano -le dice a uno-, actúa de forma más vulgar". O al tipo que hace de abuela de R, el funcionario le dice: "Así no, llora en coreano."

El surrealismo de todo aquello va tomando forma cuando R. y la chica están encamados bajo una sábana (con la bandera de Japón), mientras los funcionarios, en una improvisada fiesta, son asaltados por recuerdo de su pasado. Crímenes que ellos cometieron durante la guerra. R. cuenta cómo sus fantasías violentas se enmarañaron con la realidad de los crímenes cometidos.
Y al final, R. reconocer ser R. Pero no el R. que cometió los crímenes, sino otra persona. Y los funcionarios solo quieren cumplir con lo suyo. Y R. será ejecutado.

El film termina dando las gracias a los que participaron en la ejecución. Incluyéndonos a nosotros, los espectadores. Convirtiéndonos así, en cómplices.



El ahorcamiento (Koshikei; 1968) dirigida Nagisa Ôshima. 


viernes, 17 de octubre de 2025

Wandance

Bailar para vivir

Wandance

Kabo Kotani es un chico que sigue la corriente y prefiere no destacar. Así puede disimular su tartamudez. A su llegada al instituto parece que participará en el club de básquet, como sus amigos de secundaria.
Wandance anime

Pero ve a una chica bailar sola. Ajena al mundo. Hablará con ella y descubrirá que para Hikari Wanda bailar es una forma de expresarse sin tener que hablar y poder sentirse libre.
Wandance anime

Entonces Kotani reflexiona: Si tengo que esforzarme tanto por ser normal, prefiero hacer lo que quiero y que me tilden de raro.
Y se une al club de baile. 
Wandance anime Hikari Wanda



Wandance no cuenta nada muy original: Encontrar un lugar. Salir de la corriente. Ser uno mismo. Ser feliz... Y en las escenas de baile y coreografías se percibe otra animación, que a veces parece una sala de baile automática del Second Life. 
Pero hay algo en ese instituto, con montañas nevadas de fondo, que suma a la cadencia lenta de las grandes decisiones que toman las almas sensibles de los corazones valientes.

Luego está que las canciones que se citan, y bailan los personajes, te agraden o no. 

Wandance - anime - Hikari Wanda

👀 Para empezar le di un 4

Wandance

(Wandance)
Estudios: Madhouse, Cyclone Graphics
? episodios. Estreno: Otoño 2025

Seinen. Escuela. Baile. Tartamudez.

Basado en el manga Wandance de Coffee (Story & Art).