Sono Bisque Doll wa Koi wo Suru

Sono Bisque Doll wa Koi wo Suru (2022)

a.k.a My Dress-Up Darling - その着せ替え人形は恋をする

1 temporada (12 episodios) 

Basado en el manga de Shinichi Fukuda en publicación en la revista Young Gangan desde enero de 2018.

Wakana Gojo es un joven con una vida tranquila y retirada. Viste ropa tradicional (el jinbei), vive con su abuelo y tiene una pasión: la creación de las tradicionales muñecas hina. El abuelo, que tiene un taller-museo, le ha enseñado ese arte. El mundo de Gojo es un mundo muy alejado del mundo de su compañera de clase Marin Kitagawa, una gal popular y rodeada de amigas. Marin también tiene una pasión: el cosplay.

Kitagawa le pide ayuda a Gojo para la confección de un traje de un personaje de anime. Y ahí surge una amistad primero y un enamoramiento luego.

Aunque la unión de dos caracteres dispares, ella atrevida y moderna y él tímido y apocopado es todo un cliché hay que reconocer que los personajes están "vestidos" acorde a su forma de ser.

Gojo viste ropa tradicional siempre, excepto el uniforme escolar. Y aunque resulta algo chocante su desconocimiento de algunas cosas, se comprende por el aislamiento en el que vive. Su pasión, la vive en su hogar, en secreto, sin amig@s con los que compartirla.

Es que es tan yooooo

Kitagawa, por su parte, vive en un mundo moderno, social y juvenil. Lleva piercings y lentes de colores, siempre va "maquillada", aparentando su "estilo desenfadado" (algo altamente complejo y elaborado). Sabemos que tiene otros mundos en su vida: sus amigas, su trabajo como modelo amateur, su padre que le anula las citas y -eso no se menciona jamás- algún ¿romance? Es difícil de creer que no.

Cuando Kitagawa se enamora, la historia mejora. Es simpático verla meterse ella misma en situaciones románticas sin darse cuenta. Y aunque es OBVIO que es correspondida por Gojo, ella aún no da el paso y él siempre parece que no se entera. Para Gojo, Kitagawa es de otro mundo. Cuando ella lo saluda en el instituto con naturalidad él cree que eso la hará sentir incómoda y prefiere alejarse "para no molestar". Pero Kitagawa -como las GAL's en los animes- no es frívola, sino que tiene un gran corazón: cuando ama, ama de verdad.

El cosplay (y el vestirse y desvestirse) aporta todas las dosis de fan service que espera el espectador casual. Incluyendo una cosplayer de cuerpo loli que aparece en la ducha de Gojo sin razón alguna (¿a quién no le ha pasado eso?) y que resbala para "espatarrarse" en el baño.

Sono Bisque Doll wa Koi wo Suru es un bonito ejemplo de cómo ser novedoso usando una estructura tópica. Aunque Gojo sea el "tímido que no se entera", es creíble porque es auténtico en su ambiente. Y es ella la que se ve "enamorada" y a la vez quiere y le da vergüenza. Y triunfa porque humaniza las aficiones: aunque amemos cosas distintas, esa pasión, es parecida.

Y el éxito también viene de tener una protagonista, Kitagawa, carismática y kawaii.