sábado, 7 de marzo de 2020

Cosas ilegales

Cuando en alguna visita escolar (VISE) o visita de bienvenida a la biblioteca para conocer sus servicios y actividades hablo de eBiblio, siempre hago el mismo chiste:
-En eBiblio podéis ver películas gratis y espacio legal -pausa-. Gratis Y -énfasis- legal. No como en otros sitios de Internet, donde hay cine gratisylegal. En eBiblio es GRATIS y espacio LEGAL.

Dicho eso, les voy a contar -a confesar- una gran ilegalidad.


Viene a la biblioteca una entrañable señora mayor (no todas las señoras mayores son entrañables, algunas tiene muy mala uva) que lee bastante. Pero no lee libros en papel porque “pesan y tiene la letra muy pequeña”. Y tampoco le valen los GN (Novela en letra Grande) porque “esos aún son más grandes y pesados”.
Lo del peso de los libros me lo explicó sin darse cuenta otra señora mayor, coordinadora de un club de lectura de mayores: “No es sujetarlo lo que nos pesa, es tener que llegar hasta casa cargando con ellos”.
Reflexioné sobre ello.
Cuando yo voy a asaltar una biblioteca lo hago sólo en aquellas en las que puedo aparcar el vehículo cerca de la puerta. Así, cuando salgo cargado con un pila de libros -literal- los puedo dejar en el coche y salir pitando. Es la misma metodología que para atracar un banco. Bueno… no es que lo haya probado, pero he leído sobre el tema. 
Así que ahí va un biblioconsejo, si quieren aumentar las EstadísticasUP de préstamo, tener un buen aparcamiento cerca de la biblioteca les ayudará.
Pero volvamos a la entrañable señora mayor.
Y a su tablet.
¡Ojo! Lo llama tablet pero no lo es.
Para empezar tiene dos botones y un pequeño joystick en forma de cruz. Algo así como los mandos de la Game Boy. Si no saben que es una Game boy, por favor, búsquenlo pero no lo pregunten abiertamente… No es bueno mostrar así la propia ignorancia.
La “tablet” de la señora obvio que no tiene pantalla táctil, ni internet, ni siquiera colores… Puede parecer una basura, pero a ella le es útil porque esa “tablet” permite leer documentos en PDF. Y con un conector USB ya puede ponerle libros. 

Así que le saca más rendimiento a esa “tablet” con botones que nosotros (biblioteques) a esas tablets limitadas y no seguras que nos mandaron desde la Diputació de Barcelona.


Ehem...
La señora pasa una tarde cualquiera, y cuando no hay testigos, se acerca al mostrador y me pasa una papel doblado. Esa hoja de libreta contiene los títulos de los libros que quiere. La nota en sí ya es entrañable. 
No se trata de un listado hecho deprisa y corriendo antes de salir de casa, sino que lo tiene -supongo yo- en un lugar concreto de la casa, y cuando oye por la radio, ve por televisión, lee en alguna revista o periódico, o alguien le dice un libro que le parece interesante, va y lo anota. Lo sé porque los títulos están escritos con diversos bolígrafos (y a veces de distinto color). 
Los ha ido escribiendo en diversos momentos. 
¿No les parece entrañable? 

Así que la señora va llenando de títulos la hoja de la libreta y cuando la tiene llena, la arranca y me la pasa a escondidas.
Yo los busco, porque esa es la parte que más me gusta de mi trabajo en biblioteca (la búsqueda), y luego se los paso.

._.

Antes que me despidan o me lleven a la cárcel (en estos tiempos en que los ladrones campan a sus anchas) quiero dejar claro algunas cosas:

1.- Ya sé que la piratería es delito. Pero lograr unir lectura con lector (esa señora mayor con su tablet con botones y un libro de Javier Sierra) es parte de mi código de honor. 
2.- La búsqueda y la -ehem- descarga no se hace ni en la biblio, ni con los ordenadores de la biblio ni en horas de trabajo. Eso no disculpa el delito, pero que no me venga un jefecito de despacho a decirme qué se hace y qué no se hace en el mostrador de préstamo.
3.- Y ahí les dejo un gif de Oedo Tai bailando antes de un combate:
No, no tiene nada que ver. 
Pero es Oedo Tai bailando.


2 comentarios:

  1. Entrañable....yo hago una cosa parecida y por las mismas razones (el peso del libro en una señora mayor que tiene las muñecas delicadas) a una señora de 75 años y también me pasa una lista que saca de a saber donde y en la que yo siempre añado un par de títulos que creo le pueden gustar...y siempre es tan, tan agradecida....espero poder hacérselo durante mucho tiempo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ^_^ La mía incluso escribe un "Muchas gracias" al final de su lista de peticiones.
      Son cosas bonitas.

      Eliminar

¿Y tú qué opinas?