El buzón de devoluciones de la biblioteca, si tienen la suerte/desgracia de tener uno, siempre será un pozo de anécdotas. Por lo general, desagradables.
¿Por qué la gente echa ahí restos de comida/bebida o basura?
¿Son acaso estúpidos? ¿O son gamberros que creen salir impunes de su maldad?
Encontrar restos de comida o huellas grasientas en los libros de la biblioteca es algo asqueroso, sí. Pero los verdaderamente asquerosos son aquellos que se ponen a comer en la biblioteca y creen que no los ves/oyes/hueles.
Y cuando les pillas, recurren a negar la evidencia. El torrente de excusas escala el ridículo sin pudor.
¿Por qué? ¿Por qué esta tendencia a la mentira sobre la mentira?
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