jueves, 21 de junio de 2018

Las gafas no son para los dientes


Esa gente que se para en el mostrador de la biblioteca, se quita las gafas de sol, las sujeta con los dientes y luego intenta pedirte un libro de termodinámica escrito por un señor de apellido polaco.

Es una manía que no entiendo. La voluntad deliberada de dificultar la comunicación. 
Amigo: si vas pronunciar un apellido extenso y sin vocales en un idioma poco usual, procura no tener algo en la boca.

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